¿Qué es la Ingeniería Biotecnológica?
Para entender el aporte y la magnitud que tiene la ingeniería biotecnológica en la actualidad, es necesario comprender qué significa y por qué es tan importante para mejorar la calidad de vida de las personas.
El objetivo principal de esta disciplina es aplicar los conocimientos y técnicas de la biotecnología en la solución de problemas y en la mejora de procesos en diversos campos, como la medicina, la agricultura, la industria alimentaria, el medio ambiente y muchos otros.
Esta se basa en el uso de organismos vivos, como células, bacterias, levaduras y plantas, o de componentes biológicos, como enzimas y ADN, para desarrollar productos y procesos que resulten beneficiosos para la sociedad. Esto implica la manipulación y modificación genética de los organismos para obtener características o funciones específicas.
La ingeniería biotecnológica abarca una amplia gama de técnicas y herramientas, como la ingeniería genética, la biología molecular, la bioinformática, la fermentación, el cultivo de tejidos, entre otras. Estas técnicas permiten la producción de medicamentos, alimentos mejorados, biomateriales, biocombustibles, enzimas industriales, entre otros productos y soluciones biotecnológicas.
Además, busca utilizar los avances científicos y tecnológicos en biología para mejorar y transformar los procesos y productos, con el objetivo de beneficiar a la sociedad y contribuir al desarrollo sostenible.
¿Se mejora la calidad de vida con la Ingeniería Biotecnológica?
En la era actual, la Ingeniería Biotecnológica ha emergido como una disciplina clave que combina los principios de la ingeniería y la biología para desarrollar soluciones innovadoras, lo que puede impactar positivamente la salud humana, mediante los siguientes avances y aportes:
Terapias génicas:
Son tratamientos médicos diseñados para corregir enfermedades genéticas hereditarias. Se basan en la capacidad de modificar las células para corregir o reemplazar genes defectuosos.
Existen diferentes enfoques en el campo de la terapia génica, pero en general, se pueden destacar dos principales:
Terapia génica in vivo: En este enfoque, los genes terapéuticos se introducen directamente en el organismo del paciente. Se utilizan vectores, que son vehículos modificados, como virus o plásmidos para transportar el material genético hasta las células objetivo. Una vez dentro, se expresan y pueden corregir el defecto genético o proporcionar una función que falta.
Terapia génica ex vivo: En este caso, las células del paciente se extraen y se modifican en el laboratorio, se modifican genéticamente para corregir el defecto o introducir un gen terapéutico.
Después de la modificación, las células se multiplican en grandes cantidades y se reintroducen en el paciente. Este enfoque se utiliza especialmente en enfermedades donde es necesario modificar células sanguíneas o células madre.
Esta profesión ha contribuido al desarrollo de las herramientas necesarias para la terapia génica, como la identificación de los genes responsables de enfermedades genéticas, la manipulación del ADN y el desarrollo de vectores eficientes y seguros para la entrega de los mismos. Además, la tecnología de edición, como CRISPR-Cas9, ha revolucionado la capacidad de editar y corregir de manera precisa el ADN en las células.
Gracias a estos avances, se han demostrado resultados prometedores en el tratamiento de enfermedades como: la fibrosis quística, la distrofia muscular de Duchenne, la anemia de células falciformes, entre otras.
Aunque todavía hay desafíos técnicos y regulatorios que abordar, la Ingeniería Biotecnológica ha allanado el camino para el desarrollo de terapias que tienen el potencial de curar enfermedades genéticas hereditarias y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas.
Medicina regenerativa:
La Ingeniería Biotecnológica ha desempeñado un papel crucial en este campo, al proporcionar herramientas y técnicas para la regeneración y reparación de tejidos y órganos humanos. La medicina regenerativa se centra en restaurar la función de tejidos y órganos dañados o enfermos, en lugar de simplemente tratar los síntomas.
Algunas formas en las que la Ingeniería Biotecnológica ha contribuido a la medicina regenerativa:
Ingeniería de tejidos: Ha permitido la creación de tejidos y órganos artificiales mediante la combinación de células, andamios tridimensionales y señales de crecimiento celular. Las células pueden cultivarse en laboratorio y luego implantarse en el cuerpo para reemplazar tejidos dañados. Por ejemplo, se han desarrollado injertos de piel, cartílago y hueso para tratar quemaduras, defectos congénitos y lesiones óseas.
Células madre: Tienen la capacidad de diferenciarse en diversos tipos celulares y de autorrenovarse. La Ingeniería Biotecnológica ha permitido su expansión y manipulación para su uso en la medicina regenerativa. Pueden diferenciarse en células de diferentes tejidos y órganos, y se utilizan para la reparación de tejidos dañados, como el corazón, el hígado y el sistema nervioso central.
Terapia génica: Como se mencionó anteriormente, la terapia génica también tiene aplicaciones en la medicina regenerativa. Se pueden utilizar técnicas de Ingeniería Biotecnológica para modificar genéticamente células madre o células específicas con el fin de corregir defectos genéticos o promover la regeneración de tejidos. Por ejemplo, para tratar enfermedades neurodegenerativas, lesiones de la médula espinal y enfermedades cardíacas.
Impresión 3D de tejidos y órganos: Ha sido aplicada en la medicina regenerativa para crear estructuras complejas de tejidos y órganos. Mediante el uso de bioimpresoras, se pueden depositar células y biomateriales en patrones tridimensionales precisos para recrear la estructura y la función de los tejidos.
Diagnóstico y detección temprana:
Este campo de estudio ha tenido un impacto significativo en el área del diagnóstico y la detección temprana de enfermedades. Ha proporcionado herramientas y técnicas avanzadas que permiten una detección más precisa, rápida y sensible de diversas condiciones médicas.
Su contribución a este campo:
Pruebas genéticas: Analizan el ADN de un individuo para detectar mutaciones genéticas asociadas con enfermedades hereditarias, predisposición a patologías y respuestas a medicamentos; pueden proporcionar información valiosa para el diagnóstico y el asesoramiento genético.
Biopsias líquidas: Ha hecho posible la detección y el análisis de material genético y otras moléculas específicas en muestras de líquidos corporales, como sangre, orina y saliva. Las biopsias líquidas son menos invasivas que las biopsias tradicionales y pueden proporcionar información sobre la presencia y la progresión de enfermedades, como el cáncer, así como sobre la respuesta al tratamiento.
Biosensores y dispositivos portátiles: Estos dispositivos pueden detectar biomarcadores específicos en muestras biológicas y proporcionar resultados en tiempo real. Por ejemplo, hay dispositivos portátiles que pueden medir niveles de glucosa en personas con diabetes o detectar infecciones virales en el punto de atención.
Técnicas de imagen molecular: A través de este campo de estudio, se ha mejorado las técnicas de imagen médica, permitiendo la visualización y el seguimiento de procesos biológicos a nivel molecular. Por ejemplo, la tomografía por emisión de positrones (PET) y la resonancia magnética funcional (fMRI) pueden utilizar moléculas radiactivas o marcadores específicos para detectar la actividad metabólica o la expresión de proteínas en tejidos y órganos.
Microarrays y secuenciación de próxima generación: Estas tecnologías permiten el análisis simultáneo de miles o millones de secuencias de ADN o ARN en una sola muestra. Esto ha mejorado la capacidad de diagnosticar enfermedades genéticas, infecciones, enfermedades virales y cáncer, así como de identificar biomarcadores específicos para el pronóstico y la selección de tratamientos.
La Ingeniería Biotecnológica ha transformado el campo del diagnóstico y la detección temprana al proporcionar herramientas y técnicas más avanzadas y precisas.
La trascendencia de la Ingeniería Biotecnológica en la actualidad
Son tantos los campos a los que contribuye la Ingeniería Biotecnológica que, en definitiva, es una gran opción de estudio en la Universidad EIA, con el pregrado en Ingeniería Biotecnológica.
Ahora, más que nunca, se ha convertido en una poderosa herramienta para mejorar la calidad de vida de las personas en diferentes aspectos. Desde la salud humana hasta la producción de alimentos y la protección del medio ambiente.
Estudiar el pregrado en Ingeniería Biotecnológica es crucial porque se pueden utilizar los conocimientos adquiridos para curar enfermedades, para tratar enfermedades debilitantes en especies en peligro de extinción. Sin duda alguna, el mundo sin ingenieros biotecnológicos no sería igual; muchas de las enfermedades continuarían siendo intratables.