Colombia 2025: “Un país al borde de una nueva oportunidad”
El evento «Colombia 2025: Un país al borde de una nueva oportunidad» dejó claro que, aunque el país atraviesa un escenario complejo, aún existen oportunidades reales si se toman decisiones con responsabilidad y visión de futuro.
Saúl Pineda abrió el espacio resaltando la importancia de seguir construyendo propuestas sobre el país en el que creemos, a pesar de la incertidumbre que llega desde el orden nacional. Alejandro Gaviria Uribe insistió en que, aunque la economía ha demostrado su fortaleza, preocupan los retrocesos en salud, servicios públicos, educación y energía. En esa misma línea, Jose Manuel Restrepo DBA, rector de la Universidad EIA – Escuela de Ingeniería de Antioquia, recordó que el país no puede seguir ignorando sus problemas estructurales, como el incumplimiento de la regla fiscal o la crisis en salud y educación.
Entre el pesimismo y el optimismo, María Margarita Zuleta planteó que el verdadero sentimiento hoy es el desgano, pues ya no hay tiempo para que el gobierno impulse cambios profundos, pero sí espacio para seguir diluyendo soluciones. Lina María Garrido, desde el Congreso, advirtió que no podemos dejarnos engañar por cifras que maquillan la realidad y que quienes aspiren a la presidencia en 2026 deben hablarle con la verdad al país.
Desde la visión económica, Jorge Iván González insistió en que el Plan Nacional de Desarrollo tiene los instrumentos necesarios, pero no ha logrado convertirse en la verdadera hoja de ruta del gobierno. Juan Daniel Oviedo Arango agregó que el futuro de la educación debe entenderse como un esfuerzo mixto, que reconozca la realidad de los 2,1 millones de jóvenes de estratos 1, 2 y 3 que acceden a la educación superior, de los cuales aproximadamente la mitad estudian en universidades privadas y la otra mitad en universidades públicas. También alertó sobre el riesgo de creer que las cifras positivas significan que todo está bien.
Las reflexiones de Jorge Humberto Botero pusieron el foco en tres grandes amenazas: la guerra comercial global y su impacto en precios y abastecimiento, la crisis fiscal marcada por un bajo recaudo y una ejecución deficiente, y la reforma al Sistema General de Participaciones, que podría desatar una crisis aún mayor si no se definen bien las competencias territoriales.
Frente a este panorama, Mauricio Cárdenas fue enfático en la necesidad de recuperar la confianza del sector privado, clave para reactivar el crecimiento. Y aunque las advertencias fueron muchas, vale la pena cerrar destacando un mensaje de optimismo de Jose Manuel Restrepo: Colombia tiene oportunidades en su biodiversidad, cultura, territorios y talento emprendedor, pero aprovecharlas requiere pasar la página, construir con esperanza y preparar desde ya un futuro diferente para 2026.