¡De un año difícil a un año desafiante!
De acuerdo con un reporte de la Universidad EIA, en los últimos 20 años la tendencia de variación del PIB regional año tras año sigue una senda similar a la del país. Sin embargo, la recuperación en el periodo posterior a la pandemia fue más pronunciada en la región. Este fue el resultado de una mayor resiliencia de los negocios locales y del aprovechamiento de los apoyos estatales tanto directos como indirectos – a través de la financiación – que ocurrieron en el periodo 2020-2021.
A juzgar por las tendencias comparadas de mediano plazo – continúa el informe – al cierre de 2023 resultaba previsible la convergencia de la región y del país en un crecimiento alrededor del 1.0% – incluso podría resultar menor para el caso de Antioquia – como claro reflejo de la caída generalizada en el desempeño de los distintos sectores de la economía regional.
La producción industrial que crecía a una tasa promedio mensual del 12.0% en 2022 ya decrecía a una tasa promedio mensual de -7.5% al final de 2023. La misma tendencia se presentó en las ventas del comercio minorista que crecían a tasas promedio mensual del 9,4% en 2022 pero descendían a una tasa promedio mensual de -7.3% a finales del año 2023.
La evidencia más específica del bajo desempeño reciente de la economía regional lo señala el hecho de que mientras el promedio de crecimiento en el período enero – noviembre de 2022 fue positivo para todos los subsectores que mide la encuesta mensual manufacturera del DANE, para el mismo período de enero – noviembre de 2023 el crecimiento fue negativo para todos los subsectores con excepción de alimentos y bebidas que prácticamente permaneció en el estancamiento al crecer solo 0,1%. Las caídas más pronunciadas ocurrieron en textiles y confecciones (-14.2%), cuero y calzado (-14.7%) y productos metálicos (-14.4%).
En otro frente de actividad, la región se aprestaba a recibir a finales de 2023 un número previsible de 700.000 visitantes extranjeros no residentes, una cifra apenas similar a la alcanzada durante el 2022, después de dos años continuos de crecimiento en los flujos turísticos hacia la región.
La conclusión es clara según Saúl Pineda Hoyos, Director del Centro de Pensamiento, “la actividad económica regional, que había quedado con aire en la camiseta después de la franca recuperación del año 2021, ha entrado en terreno pedregoso después del balance final de 2023”.
Tendencia de las exportaciones 2023 – 2024
El reporte de la Universidad EIA precisa que, mientras en 2022 todos los sectores mostraron un crecimiento en sus exportaciones, con un balance final del 12,2% de aumento en las exportaciones totales, para el período enero – noviembre de 2023 ese crecimiento había descendido al 5.7%.
El sector minero – energético, impulsado por un nuevo repunte en los precios internacionales del oro, crecía al 24% en el período enero – noviembre de 2023, pero tanto las exportaciones agropecuarias como las del sector agroindustrial experimentaban caídas sistemáticas durante este mismo lapso, con excepción de la maquinaria y equipo e industria automotriz, que tuvieron crecimientos del 13,8% y el 17,9%, respectivamente.
Esta tendencia de fin de año se situó en el escenario pesimista que había estimado el Centro de Pensamiento de la Universidad EIA en marzo del año anterior cuando proyectó un monto total de las exportaciones no minero energéticas de Antioquia alrededor de los US$3.607 millones (a noviembre de 2023 el acumulado de las ventas externas de estos productos alcanzaba los US$ 3.375 millones).
La buena noticia para la gestión exportadora en la región la trae este año la Organización Mundial del Comercio (OMC), que se muestra un poco más optimista sobre las tendencias del intercambio mundial para 2024, que pasaría de un crecimiento ya consolidado del 0.8% en 2023 a uno del 3.3% en 2024.
En ese contexto, parecería razonable esperar un mejor desempeño de las exportaciones no minero energéticas de Antioquia para el año 2024 que permitiría superar la cifra de US $4.000 millones que se habían alcanzado en el año 2022. ¡Es decir, para recuperar, al menos, el desempeño obtenido dos años atrás!
Consideraciones sobre las perspectivas sectoriales para 2024
El reporte de la Universidad EIA concluye con algunas previsiones del desempeño sectorial de la economía regional:
- Apuesta por la consolidación del turismo sostenible como uno de los motores en la generación de divisas y crecimiento del empleo formal en la región.
- Proyecta nuevos desafíos para el sector textil y de confecciones que se enfrentan a grandes retos competitivos en el mercado interno e internacional.
- Se muestra optimista con la proyección de la agroindustria de alimentos en los mercados internacionales como sector estratégico de la región y del país.
- Se muestra poco optimista del crecimiento de la construcción en ausencia de políticas claras de reactivación del sector por parte del gobierno nacional.
- Y llama la atención sobre la visible falta de compromiso del gobierno nacional con el avance de la infraestructura vial del departamento.
Así mismo el informe de la EIA señala algunas realidades que incidirán sobre el ambiente de los negocios en el departamento:
- Se refiere como un hecho muy positivo al renovado espacio para la concertación en torno las tareas de la innovación en la ciudad, gracias al nuevo ambiente que se respira en Ruta N para acometer proyectos conjuntos entre los sectores público, privado y académico.
- Recoge las preocupaciones de los empresarios sobre el creciente deterioro de la seguridad, tanto en las áreas urbanas como rurales del departamento.
- Y enfatiza en la inconveniencia del proyecto de reforma laboral tal y como hoy avanza en el congreso, que resultaría altamente regresivo para la inversión y el empleo en la región.
“En medio de este balance desafiante sobre las perspectivas de la economía regional, resultará clave la reafirmación de la confianza entre las instituciones locales, con un gran liderazgo del Gobernador de Antioquia y el Alcalde de Medellín, para emprender con éxito la reactivación económica como un bloque sólido de interlocución frente al gobierno nacional”, concluyó Saúl Pineda, Director del Centro de Pensamiento de la Universidad EIA.
Para acceder al reporte completo comunicarse con la Oficina de Comunicaciones de la Universidad EIA. Diana María Ortega. Celular: 300 646 20 00.