Estudiantes y docentes de la EIA acaparan podio en reto maestro de Robotex
En su última versión, este certamen desarrolló competencias en cinco categorías:
– Line Following Enhanced: robots con sensores de luz identifican y recorren una línea negra sobre una superficie.
– FolkRace: en una pista, varios robots equipados con sensores de ultrasonido o táctiles, evitan el contacto con obstáculos para realizar la mayor cantidad posible de vueltas a un circuito.
– Sumo: dos robots se enfrentan en un ‘dojo’ en el que simulan un enfrentamiento de sumo. Cada robot intenta sacar al otro del área de confrontación.
– Entrepreneurial Challenge: se define e implementa un modelo de automatización para que un robot de ‘software’ realice operaciones repetitivas para responder de manera eficiente a compromisos de la empresa Protección con sus afiliados.
– Master Challenge: reúne a los participantes con mayores competencias identificadas para la robótica a quienes se plantea un reto para ser resuelto en un plazo de 48 horas. El reto exige trabajos en mecánica, electrónica, programación y robótica.
En esta última, cuatro equipos integrados por estudiantes y profesores de Ingeniería Mecatrónica de la EIA se situaron en los cuatro primeros lugares. “La competencia Master Challenge es la que congrega a los competidores más preparados del encuentro porque necesitan haber desarrollado capacidades en múltiples campos, integrarlas y acompañarlas de otras habilidades como el liderazgo y el trabajo en equipo. En esta, los estudiantes emplean las capacidades que desarrollan en las aulas y laboratorios de la universidad para resolver retos”, comentó el profesor Juan Camilo Tejada Orjuela, del programa de Ingeniería Mecatrónica de la EIA.
El reto a resolver en el ‘Master Challenge’ consistió en desarrollar un programa informático del tipo “robot virtual” para que, de un sitio web, extrajera información sobre tareas a realizar en un ambiente hipotético de un cultivo de flores en el que dos plantas debían ser llevadas al laboratorio. Luego de capturar esta información, el robot virtual debía transmitirla a un robot móvil para que hiciera los recorridos y cumpliera las tareas de mantenimiento en un circuito a escala. “Cada equipo configuró una red local para que se pudieran comunicar entre sí el robot virtual y el físico. Así, el robot virtual tenía la posibilidad de enviar al cerebro del robot físico la información de entrada necesaria para que este último utilizara su propia programación para definir su rutina y cumplir el objetivo”, explicó el profesor Tejada.
Ante este desafío, el único grupo que pudo superarlo a la perfección por lo menos en un intento, fue el equipo Cubit, integrado por tres estudiantes de Ingeniería Mecatrónica de la EIA, a saber, Carolina Cardona Gómez, Pedro Alejandro González Betancur y Jordi Neil Sánchez Angarita. Los equipos AVRIS, Umbra y Asimov, también representantes de la EIA, se ubicaron en los puestos dos a cuatro, respectivamente. Los miembros de estos cuatro equipos ganaron el derecho a representar a Colombia en la competencia Robotex Internacional 2019 que se celebrará en noviembre en Estonia.